Cusco, junio de 2025
En La imponente ciudad imperial fue testigo de uno de los regresos más comentados del año: Tatiana Calmell, exreina de belleza y referente de la elegancia peruana, volvió a pisar la pasarela del Miss Perú, no como concursante, sino como imagen oficial y figura invitada de lujo para la edición 2025 del certamen nacional.

Tatiana, quien representó al Perú en el Miss Universe y se convirtió en un símbolo de gracia, disciplina y autenticidad, fue recibida entre aplausos y flashes durante la gala de presentación del evento “La Magia del Cusco”, organizado por la directora del certamen, Jessica Newton.
“Volver a este espacio no solo es emocionante, sino también profundamente significativo. El Miss Perú cambió mi vida, y me honra ser parte de su evolución”, expresó Calmell durante su intervención, vestida con un imponente diseño de inspiración andina en tonos dorados.
Miss Perú, una embajadora del estilo
Su presencia no fue casual. Tatiana Calmell es ahora embajadora cultural del certamen, un rol creado especialmente para este nuevo ciclo que busca fortalecer la conexión entre belleza, historia y raíces peruanas. En su paso por Cusco, participó en sesiones fotográficas en Sacsayhuamán y entrevistas con medios locales, donde remarcó la importancia de empoderar a las candidatas a través del conocimiento cultural.
Además, se ha confirmado que Tatiana formará parte del jurado en la etapa final del concurso, y será mentora de una de las candidatas finalistas, aportando desde su experiencia en certámenes internacionales.

Un legado que sigue inspirando
Tatiana Calmell no solo dejó huella por su belleza o logros en pasarelas internacionales; su activismo a favor de la educación, la salud mental y la visión objetivo de mujeres peruanas en espacios globales la han convertido en una figura admirada por nuevas generaciones.
Su regreso al Miss Perú representa un puente entre el pasado y el futuro del certamen. Con Cusco como telón de fondo, la nueva edición se perfila no solo como una competencia de belleza, sino como una celebración del poder femenino con identidad nacional.